Comenzábamos la semana fijándonos en Teatre Talia, en sus nombres propios. Analía Bueti, Orlando Dibelo, Mariano Siccardi, Emiliano Pérez, Débora Godoy, Carlos Guevara, Malena More, Jose García Arte, Carlos Mañez y Ginette Montenegro. Suena música de tango, su tango a cuestas, su bandoneón, violín, piano y el contoneo de sus bailes. Todo este compendio pusieron al público valenciano en pie.
El espectáculo ‘Este tango habla por mí’ es la conclusión de un proyecto musical que arrancó durante el confinamiento y que suma muchas horas de trabajo por parte de este grupo de artistas, bailarines y músicos. Los primeros ensayos fueron de manera virtual durante la cuarentena. De este modo fue como pusieron en común la dirección artística y musical del espectáculo.
A esto hay que añadir también, mediante el recurrido uso de videollamadas, cómo todos ellos acoplaron sus tiempos para que todo saliese según lo esperado, con el objetivo de traer el mejor tango al público en cuanto pudiese ser.
Este trabajo ha visto la luz. Lo de este lunes en el Teatre Talia fue un espacio dedicado a la cultura con importantes medidas de seguridad por el Covid-19. Con un público comprendido entre las edades de 35 y 70 años, todo repleto de emociones, el interior del Talia vibró con el espectáculo.
Tango en Valencia
Ahí vimos mucha afición por el tango. València baila, ríe y disfruta gracias a la música. Un evento que si bien llega en un momento difícil para la cultura por la actual pandemia, en palabras de su directora artística Analía Bueti, ‘espero que sirva como ejemplo de que si bien la cultura no debe parar, en cualquiera de sus manifestaciones, debemos seguir confiando en todos estos escenarios y en otros entornos seguros para seguir generando futuros proyectos culturales‘.
En un espectáculo que en plena pandemia consiguió llenar el aforo permitido por el teatro, se siguió la normativa de esta nueva normalidad.
Si te interesa el tango, te recomendamos que eches un vistazo a este enlace. Te dirigirá al Club del Tango de la Comunidad Valenciana, que se constituye con el propósito de ampliar el disfrute del baile mediante el mayor conocimiento de su cultura, orígenes y evolución. Como actividad artística, es tan libre como la pintura, la música o cualquier otro arte, sin más limitaciones que las del gusto personal, la creatividad y la armonización de la pareja con la música.